Blockchain: éste fue el principal motivo de su creación

El término blockchain está presente en muchos foros orientados a la tecnología, la cripto inversión y las aplicaciones de Internet. Incluso comienza a ser utilizado con soltura en medios de comunicación generalista, lo que favorece que la población no entendida sepa mejor lo que es y cómo funciona el blockchain.

No obstante, aún falta camino «didáctico» para comprender en profundidad el funcionamiento de la tecnología blockchain, sus implicaciones y, sobre todo, sus posibilidades de futuro. Para lograr esta mejor comprensión siempre es útil hacer un recorrido histórico del blockchain, de modo que se puede trazar su origen y primeras motivaciones.

El blockchain, una alternativa económica digital antes de las criptomonedas actuales

La primera vez que se usó el término blockchain fue en el año 1982. Fue en una disertación académica en la Universidad de Berkeley, obra de David Chaum, que tenía el título Sistemas informáticos establecidos, mantenidos y confiables por grupos mutuamente sospechosos.

La utilidad principal de esta tecnología no era originalmente el soporte de monedas digitales, pero su creador vio el potencial para ello de manera inmediata. En 1989 el propio Chaum lanzó una compañía, DigiCash, que fue la responsable de la aparición de las primeras monedas virtuales en 1995. Chaum no logró convencer a las entidades bancarias de sus beneficios y no disponía de la infraestructura con la que Internet cuenta hoy, por lo que la empresa y el proyecto fracasaron poco después.

La misma tecnología blockchain para nuevas criptomonedas

El blockchain volvió a la palestra en 2008, en foros de Internet donde comenzó a circular el artículo Bitcoin: un sistema de efectivo electrónico de persona a persona, firmado por Satoshi Nakamoto. A día de hoy se desconoce si este nombre —un seudónimo— corresponde a un usuario anónimo o a un colectivo, pero se le atribuye la creación del blockchain moderno, que estaba basado en su mayoría en las propuestas técnicas de Chaum, con algunas modificaciones.

El código fuente de la tecnología blockchain estuvo disponible para todos los desarrolladores desde el mismo 2008, por lo que era susceptible de mejorarse y modificarse. Satoshi es también el responsable de la creación ese mismo año de la primera criptomoneda moderna, el Bitcoin, que tardó casi dos años en tener un valor de 1 dólar y no alcanzó el valor de 1.000€ al cambio hasta 2017.

Ethereum, el cambio de juego en el blockchain

Tras la aparición del Bitcoin inundaron el mercado infinidad de criptomonedas similares, todas ellas derivadas del primer proyecto. En 2015, no obstante, un grupo de contribuyentes que estaban presentes en el proyecto Bitcoin crearon Ethereum. La tecnología blockchain, hasta ese momento se usaba para soportar criptomonedas pero Ethereum contiene código fuente ejecutable, lo que la hace infinitamente más flexible y versátil, por lo que también es útil para albergar NFT e infinidad de APPs descentralizadas.

Los especialistas están trabajando en la estructura elemental del blockchain, para intentar mitigar sus principales problemas: el escalado y el tiempo, y recursos necesarios para procesar cada bloque de la cadena en redes distribuidas. La mayoría de las criptomonedas actuales están pensadas para soportar industrias completas o aplicaciones específicas de muchas clases, por lo que el blockchain está llamado a mejorar, asentarse y convertirse en un estándar en Internet a medio plazo.