¿Cómo es un día en el metaverso?

Aunque es una realidad tecnológica aún en desarrollo, el metaverso aspira a convertirse en una extensión del mundo físico en el que todos nos desarrollamos. En teoría, el metaverso puede servir para complementar o para extender las posibilidades y actividades a las que tenemos acceso en nuestra vida «real», en el día a día. Desde tener una vida laboral hasta comprar y darle uso a una vivienda, pasando por ir a la universidad o viajar a otro país.

Por supuesto, también conocer a otras personas e interactuar con ellas —o más bien con sus avatares—, así como comprar y vender distintos artículos, asistir a eventos de ocio y deportivos o visitar un museo, por poner otros ejemplos. A pesar de que el punto álgido del metaverso aún está por llegar, ya es posible desarrollar un ciclo de actividades que nos pueden dar una idea de cómo es un día en el metaverso y, lo que es más importante, cómo podrá ser esa jornada en el futuro.

Las medidas de tiempo y el avatar en el metaverso

Antes de extenderse más allá es necesario explicar que el tiempo en el metaverso y en la vida «real» o mundo físico no son equiparables: en el metaverso el tiempo va más deprisa: un día completo en el metaverso equivalen a treinta minutos en el mundo físico. Por eso han podido realizarse experimentos recientes en el metaversos como el de la influencer de TikTok @madcitylif, que afirmó experimentar la vida virtual durante 240 días —en el metaverso, que son cinco días en tiempo físico—.

Otro aspecto importante es saber que es necesario un avatar en el metaverso, es decir, una representación de nosotros mismos para poder tener presencia en ese mundo virtual. Nuestro avatar puede parecerse a nosotros y ser una representación más o menos fiel de nuestro físico y nuestras características corporales o también un personaje totalmente ajeno a nuestra identidad, una caricatura, un personaje animado o de ficción, etc.

Socializar, aprender o acudir a una cadena de comida rápida en el metaverso

Son algunas de las actividades que ya son posibles en el metaverso, a través del uso de unas gafas de realidad virtual. Muchas empresas del metaverso están iniciando desarrollos y diseñando espacios que permiten conocer personas con intereses afines, desarrollar ideas en grupo o establecer alianzas profesionales dentro del metaverso. Por ejemplo, MadWorld es un espacio de coworking creativo y de formación en el metaverso donde expertos del sector y marcas como APG Spain, BCMA, Inmersiva XR y Más Mujeres creativas pueden disponer de sedes virtuales en las que estudiar, aprender, cooperar y trabajar a través de sus avatares.

Una cadena de comida rápida como McDonald’s también ya está diseñando en su departamento de innovación un «restaurante virtual» para tener presencia con él en el metaverso. En este tipo de establecimiento se persigue replicar el tipo de servicio que ya se ofrece en los restaurantes físicos: ofrecer un lugar donde reunirse y socializar, además de realizar pedidos de comida rápida. La única diferencia es que, una hamburguesa con patatas pedida en el restaurante virtual sería entregada a domicilio en el mundo real al usuario asociado al avatar que ha hecho el pedido en el metaverso.