La pieza clave del metaverso: los GPUs

Para que cualquier realidad tecnológica se desarrolle con plenitud tienen que confluir varios factores distintos. No obstante, uno de los principales tiene que ver con el apartado técnico; el metaverso no es ajeno a este requisito. Las ventajas del metaverso son innumerables pero, para poder exprimirlas al máximo es necesario contar con los componentes que permitan una gestión y procesamiento apropiado de datos. En ese sentido uno de los componentes con mayor relevancia, dadas las características del metaverso es la unidad GPU.

¿Qué es una GPU?

Una GPU o Graphics Processing Unit es la unidad encargada del procesamiento gráfico en los ordenadores y equipos informáticos similares, desde las tabletas y teléfonos móviles hasta los televisores o los smartwatches. Cualquier dispositivo que tenga una pantalla y que deba «entregar» al usuario un entorno gráfico con imágenes —más o menos complejas— requiere de un procesador de estas características.

A principios del siglo XX todos los fabricantes de ordenadores prestaban especial atención a la CPU o Central Processing Unit, es decir, al procesador encargado de que esos ordenadores desplegarán todas sus funciones. A mejor procesador, mayor capacidad de gestión de datos y velocidad de respuesta. En esta etapa, las GPUs, bien estaban integradas en las placas base con el resto de componentes del equipo, bien tenían una entidad separada, pero no eran demasiado complejas.

Con el paso de los años, la evolución de los entornos de escritorio, la generalización de sistemas operativos como Windows y el desarrollo de los videojuegos, los procesadores gráficos adquirieron cada vez más importancia, requirieron de mayor potencia y complejidad y consumieron progresivamente más recursos de los equipos. Actualmente, los ordenadores de altas prestaciones y el HPC o High Performance Computing requieren de GPUs dedicadas, con procesadores tan potentes o más que los necesarios para «mover» un equipo al completo; también cuentan con memorias específicas destinadas únicamente al procesamiento gráfico.

El papel de las GPU en entornos de realidad virtual como el metaverso

El metaverso es un entorno eminentemente gráfico. En él, los usuarios interactúan en espacios con renderizados y modelados relativamente complejos, texturas digitalizadas, objetos tridimensionales y movimientos que pretenden imitar lo máximo posible a los del mundo analógico. Este contexto requiere de GPUs realmente potentes, pues la cantidad de información exclusiva del apartado gráfico se sitúa en el rango de los terabytes.

Por eso, el desarrollo pleno del metaverso no irá ligado solamente a la adopción y al uso generalizado por parte de los usuarios de gafas de realidad virtual —que también—. La capacidad de fabricar, mejorar y potenciar GPUs pensadas específicamente para ofrecer altas prestaciones en entornos de realidad virtual está íntimamente relacionada con un potencial éxito del metaverso.

Actualmente ya existen desarrollos avanzados de GPUs para entornos gaming, así como para contextos profesionales donde el renderizado y la vectorización gráfica son imprescindibles —como la arquitectura o la ingeniería industrial, por ejemplo—. Focalizar esfuerzos en la implementación de GPUs para contextos como el metaverso deben ser una prioridad.