La moneda del metaverso y cómo se realiza un pago

Todo parece indicar que el metaverso continuará desarrollándose y puede ser, en el futuro, un terreno en el que desarrollar con intensidad actividades sociales, culturales, empresariales, etc. Pero ¿también económicas? El papel de la moneda en el metaverso, cómo comprar en el metaverso y cuál será la dinámica de las transacciones e intercambios de bienes son algunas de las cuestiones que suscitan más interés.

Ya existen varios modelos activos de criptomoneda de metaverso pero, ni todas son iguales, ni los intercambios —o compraventas, si se prefiere— se realizan del mismo modo. En algunos casos es imprescindible disponer de una criptowallet o cripto cartera vinculada a una entidad bancaria; en otros, no.

 Monedas virtuales en los videojuegos

Una de las «divisas» con más recorrido histórico y más utilizadas son las monedas virtuales. Se adquieren con dinero real abonado por el usuario, que recibe a cambio una cantidad determinada de unidades de la moneda en cuestión. Son muy habituales en el mundo de los videojuegos y sirven para adquirir beneficios vinculados estrictamente a ese videojuego: armas, mejoras en los personajes, acceso a habilidades o niveles superiores, etc.

Cada entorno de juego tiene las suyas: Mana en Centraland, Sand en Sandbox, V-Bucks en Battle Royale, etc. En algunos casos el usuario puede recuperar parte del valor abonado previamente gracias a programas de fidelidad o participando en el desarrollo de otros videojuegos de la misma compañía y en sus beneficios futuros, pero no es lo habitual.

Criptomoneda del metaverso

La criptomoneda es otro tipo de «divisa», aunque diferente de las monedas virtuales ya citadas. La criptomoneda funciona apoyándose en una base de datos distribuida, construida con tecnología blockchain. No tienen existencia física, pero sí un valor de mercado; el valor de cada criptomoneda se establece en función de la confianza en esa criptomoneda en particular y de la demanda en cada momento. En el momento de la redacción de esta entrada el Bitcoin y el Ethereum, dos de las criptomonedas más extendidas y demandadas, valen 21.000 € y 1.400 € respectivamente.

El hecho de que las criptomonedas no dependan de ninguna autoridad centralizada, como un gobierno o un Banco Central, la facilidad con la que su valor se incrementa o se desploma y la obligatoriedad de disponer de una criptowallet —que es necesario crear y configurar— la aleja, de momento, como moneda de intercambio habitual en el metaverso. Al menos, lo suficiente como para que su uso sea generalizado.

Otras monedas del metaverso: los NFT y otros Tokens

Puede «comerciarse» en el metaverso sin necesidad de recurrir a monedas virtuales o criptomonedas. En ese caso utilizaríamos un NFT como pago o garantía. Los NFT son creaciones digitales únicas, con certificado de autenticidad, que puede venderse o subastarse a cambio de dinero real, si se desea y se ha configurado una criptowallet. Se apoyan también en la tecnología blockchain y están sustentados por smart contracts, que garantizan la integridad del proceso de creación, la autoría, etc. Al igual que las criptomonedas, pueden usarse como herramienta de inversión, pero asumiendo muchos de los riesgos que implica el uso de éstas.

Existen otros Tokens, diferentes a los NFT’s y no apropiados para invertir, pues carecen de valor económico, pero que sí pueden intercambiarse en un metaverso determinado entre los usuarios del mismo. Son los Fan Tokens: creaciones digitales de entidades deportivas o clubes de fans que persiguen incrementar el engagement de la comunidad y que funcionan, a efectos prácticos, del mismo modo que lo hacen los cromos de las ligas de fútbol, por ejemplo.